
NUESTRA SEÑORA DE LA AURORA
Virgen gloriosa representada como Cuna de la Luz y Esfera del Sol Divino. La imagen representa a la Virgen María en un momento anterior al nacimiento de Jesús, es decir, antes de ser madre, motivo por el cual no lleva Niño Jesús en sus brazos, sino que porta entre sus manos a Jesús en forma de Sol, con las iniciales “JHS”, simbolizando a María como signo anticipado, anuncio de la llegada de Jesucristo y la Estrella de la mañana que pone fin a la noche y precede el comienzo del nuevo día, simbolizando que María fue el primer brillo de claridad para la humanidad y que, a partir de Ella, como la Aurora de la mañana, se vislumbraría el Sol en la resplandeciente y verdadera luz salvadora, Jesús.
Es una talla de candelero, de 1,63 metros de altura. Su cabeza aparece inclinada hacia abajo, mostrando un rostro delicado de Virgen niña y ojos de color verdes claros, con boca cerrada y presentando un pequeño hoyo en su barbilla que se desliza hacia abajo. Los dedos de sus manos son largos y muy entreabiertos. Porta corona de reina, radiantes ráfagas alrededor y media luna a sus pies. Es obra del imaginero sevillano D. Manuel Ramos Corona (año 2001).
Se encuentra expuesta en su altar de culto de la Colegiata de Santa María de la Encarnación La Mayor.